Comisiones Obreras de Andalucía | 22 febrero 2025.

  • Sectores
    Gente como Tú mejora el mundo

    Un enemigo al acecho: la siniestralidad laboral

      Casi 105.000 accidentes de trabajo es la escalofriante cifra que nos dejó 2024 en Andalucía y que continúa en aumento con personas que salen de sus casas para ir a ganarse la vida y la pierden en su puesto de trabajo o de camino a él. Una terrible realidad ante la que parece que la sociedad está anestesiada a base de haberse convertido en algo cotidiano y esto es algo que no podemos permitir. La siniestralidad laboral, en cualquiera de sus formas, no puede quedar en una noticia más del informativo o en un minuto de silencio cuando sus consecuencias son irreversibles.

      21/02/2025.
      Artículo de Nuria López Marín sobre siniestralidad laboral en ElDiario.es

      Artículo de Nuria López Marín sobre siniestralidad laboral en ElDiario.es

      Gobiernos, empresariado, sindicatos y sociedad en general hemos de hacer un frente común ante una lacra que se ha llevado por delante la vida de 128 personas trabajadoras en Andalucía durante 2024. Hombres y mujeres que perdieron la vida durante su jornada laboral o en los desplazamientos entre su hogar y su centro de trabajo. De hecho, de los 8 accidentes mortales en mujeres, 7 ocurrieron en accidentes in itinere, lo que evidencia la necesidad de tomar medidas para mejorar la relación existente entre la conciliación personal y familiar, la parcialidad, las condiciones adversas y los ritmos frenéticos de trabajo que sufren las mujeres trabajadoras andaluzas.

      Vemos como la siniestralidad laboral se ha cronificado en nuestra sociedad, especialmente en sectores como servicios, que se sitúa en cabeza en este dramático ranking, seguido por la construcción, la industria y la agricultura. Además, los datos indican que la siniestralidad laboral continúa aumentando y cada día más personas ven peligrar su salud y su vida mientras desempeñan sus trabajos.

      En respuesta a esta realidad nace la III Estrategia de Seguridad y Salud en el Trabajo, en la que CCOO de Andalucía ha trabajado con el horizonte puesto en que sea una estrategia que no se quede en palabras, sino que se transforme en hechos concretos. De ahí que desde el sindicato instemos a su inmediata puesta en marcha.

      En ella buscamos soluciones efectivas para la Prevención de Riesgos Laborales en las empresas andaluzas, de las que más del 90% son PYMEs, destacando la innegable labor de nuestras delegadas y delegados en la mejora de las condiciones de trabajo como paraguas de protección para la seguridad y salud de las personas trabajadoras.

      Pero esa acción sindical, sin duda imprescindible para acabar con los accidentes y las muertes en el trabajo, necesita ir acompañada de un compromiso certero de las empresas en la lucha contra esta lacra; así como de medidas y políticas más decididas de los gobiernos para crear entornos laborales seguros y saludables. No podemos permitir que el trabajo, que es un medio de sustento y realización personal, se convierta en un riesgo para la vida.

      Por ello, es imperativo que el Gobierno andaluz tome medidas reales y efectivas que respondan a las necesidades de nuestro tejido empresarial y que el compromiso empresarial con la Prevención de Riesgos Laborales sea una apuesta real, -ya que en la actualidad es bajo-, a pesar de que sus beneficios van en aumento. Alegar pérdidas o dificultades económicas tienen que dejar de ser excusas recurrentes para no invertir en la seguridad y salud de sus trabajadoras y trabajadores.

      Es nuestro deber seguir luchando, con ambición y determinación, para que la salud y seguridad en el trabajo sea una realidad para todas y todos. No podemos seguir perdiendo vidas por un enemigo tangible que acecha en el entorno laboral. Estamos convencidas y convencidos de que con prevención las muertes, los accidentes laborales y las enfermedades profesionales son evitables, de manera que seguiremos exigiendo la mejora de las condiciones laborales a través de la Negociación Colectiva y defendiendo los derechos de las personas trabajadoras para que el trabajo no conlleve la pérdida de la salud.

      Asimismo, es vital considerar la perspectiva de género y la importancia de la salud mental bajo la premisa de que solo apostando por entornos laborales seguros y por la seguridad y salud en el trabajo conseguiremos evitar el drama personal y familiar que conlleva la siniestralidad laboral en cualquiera de sus formas, hasta alcanzar la cifra que ha de ser el objetivo de toda la sociedad, la siniestralidad laboral cero.