Comisiones Obreras de Andalucía | 20 abril 2024.

  • Sectores

    ADMINISTRACIÓN LOCAL

    La sección sindical de CCOO en el Ayuntamiento de Jaén, muestra su malestar por la falta de medidas protectoras del colectivo de vigilantes de mercados municipales

      La entrada en vigor del Real Decreto que recoge el Estado de Alarma contra el COVID-19, ha puesto de manifiesto las deficiencias que existen a la hora de llevar a cabo ciertas medidas sin los medios técnicos de prevención necesarios.

      19/03/2020.
      Mercado de San Francisco (Foto de archivo)

      Mercado de San Francisco (Foto de archivo)

      La Sección Sindical de CC.OO. en el Ayuntamiento de Jaén denuncia la falta de medios de protección individual (EPIS) del colectivo de vigilantes de los mercados municipales.

      Ante la situación presentada por el COVID-19, el Ayuntamiento de Jaén con buen criterio, ha arbitrado medidas de prevención para evitar el contagio sobre el acceso de ciudadanos/as a los mercados municipales. Estas medidas consisten, entre otras, en el control por parte de los/as vigilantes, del flujo de personas que acceden a estos espacios públicos.

      Lo que en principio se presume como una medida eficaz, pierde la efectividad ante la falta EPIS (mascarillas, guantes..etc) que el Ayuntamiento debe de entregar a los trabajadores y trabajadoras.

      Entendemos que las medidas de regular el flujo de personas es acertada, pero si esta no va acompañada de los medios necesarios, todo tiende a causar el efecto contrario al pretendido.

      Sabemos que otros colectivos del propio Ayuntamiento están recibiendo hasta cinco mascarillas por trabajador/a y al colectivo de vigilantes no se les facilita ni una sola.

      Toda medida que no sea aplicada en su integridad, a parte de perder efectividad, supone un riesgo para los/as trabajadores/as y la ciudadanía en general.

      Desde estas líneas demandamos al Ayuntamiento de Jaén reconsidere sus postura, y les haga llegar los medios de protección al colectivo de vigilantes municipales, al igual que se ha hecho con el resto de colectivos que mantienen un trato directo con la ciudadanía.

      La discriminación no motivada en temas de salud pública no es asumible ni debería existir en empresas, y aún menos, en una Administración Pública.